Coronavirus: vuelve el problema del uso masivo de plástico
Mascarillas de un solo uso, guantes quirúrgicos y botellas de desinfectante que nos protegen de la propagación de COVID-19 terminan finalmente en las calles, en los mares y entre la vida silvestre, volviendo nuevamente el problema del uso masivo de plástico
Luego de más de un mes de cuarentena ciudades alrededor del mundo lucen vacías.
Tal es el caso de la ciudad costera de Kalamata, situada al suroeste de Atenas en Grecia, tradicionalmente conocida por sus aceitunas y cuyas calles usualmente eran bulliciosas y muy transitadas, ahora se encuentran en gran parte vacías.
Como en el resto de Grecia, a los residentes de Kalamata se les permite salir sólo en circunstancias estrictas, incluyendo ejercicios cortos y compras de comestibles.

Pero los guantes, toallitas húmedas y frascos de desinfectante desechados están esparcidos por los parques, las aceras y las carreteras, mientras las personas tratan de protegerse a sí mismas y a los demás de los contagios del COVID-19.
El problema no se limita a la pequeña ciudad griega. Residuos similares están causando problemas en las grandes metrópolis como Nueva York y Londres.

E incluso ha llegado a las deshabitadas islas Soko. A unas pocas millas náuticas de Hong Kong, Gary Stokes del grupo conservacionista OceansAsia encontró unas 100 máscaras en las aguas en el curso de tres visitas a la playa.
«No habíamos notado tantas máscaras antes en un lugar tan remoto«, dijo Stokes, quien sospecha que vinieron de la cercana China o Hong Kong. «Cuando las encontramos, sólo habían pasado de seis a ocho semanas desde que la gente había empezado a usar estas máscaras.»
El impacto en la vida silvestre
Los guantes, las mascarillas y otros elementos de protección personal son fundamentales para quienes luchan contra la pandemia, pero también son muy utilizados por el público en general. Sin embargo, debido a que no siempre se eliminan adecuadamente, los ambientalistas temen consecuencias negativas para la vida silvestre y la lucha contra la contaminación por plásticos.
«Si se tiran a la calle, cuando llueva, los guantes y las mascarillas terminarán finalmente en el mar«, dijo Anastasia Miliou, bióloga marina y directora de investigación del Instituto Archipiélagos de Conservación Marina, con sede en Grecia.
Incluso en Hong Kong, donde la basura es escasa, Stokes dijo que hay diversas otras formas en que las mascarillas pueden llegar al mar.
«La gente camina, saca sus carteras y de sus bolsillos cae accidentalmente una mascarilla«, explicó, añadiendo que incluso si se ponen en la basura, son lo suficientemente ligeras como para volar con la acción del viento.
Y una vez que entran en el agua, representan una amenaza para la vida marina.

«(En aguas de Hong Kong) tenemos delfines rosados y tortugas que pasan por este lugar«, dijo Stokes. «Un estudio recientemente publicado demostró que cuando el plástico se deja en el agua durante un determinado tiempo, y las algas y bacterias crecen en ella, genera un olor a comida para tortugas.«
¿Cómo reciclar correctamente las mascarillas? Es un problema
Los elementos de protección personal que no terminan en el mar y en espacios naturales, tampoco son fáciles de manejar para su disposición final, explicó Joan Marc Simon, director ejecutivo de Zero Waste Europe, una ONG con sede en Bruselas.
Simon señala el programa europeo de reciclaje, según el cual los minoristas y los productores pagan por la recogida y el tratamiento de los envases de plástico. Como los guantes no se consideran un embalaje, no se pueden poner en los contenedores de reciclaje de los hogares.
Incluso los guantes hechos de goma de látex, un producto natural, no siempre son una opción ecológica, agregó Simon. Depende de los aditivos químicos usados para producirlos, dijo, algunos de los cuales pueden dañar el medio ambiente cuando se descomponen.
La portavoz de la Comisión Europea para asuntos medioambientales, Vivian Loonela, dijo recientemente al medio de comunicación EurActiv que es demasiado pronto para evaluar el impacto del coronavirus en la cantidad total de residuos de envases de plástico generados en 2020.
¿Cuáles son las opciones sostenibles en esta pandemia?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó que lavarse las manos regularmente ofrece más protección contra el contagio de COVID-19 que usar guantes de goma cuando se está en áreas públicas, mientras que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE.UU. dice que, para el público, las mascarillas de tela lavables ofrecerían la protección necesaria.

Y mientras que los elementos de protección personal utilizados en las instalaciones médicas son en gran parte no reciclables o no reutilizables, están surgiendo innovaciones sostenibles.
En los Estados Unidos, el fabricante de automóviles Ford está produciendo batas reutilizables a partir de materiales de bolsas de aire que pueden lavarse hasta 50 veces, mientras que la Universidad de Nebraska también está haciendo pruebas para ver si la luz ultravioleta descontaminará y prolongará la vida de las mascarillas médicas y, por lo tanto, se reducirán los desechos.
Joan Marc Simon, de Zero Waste Europe, cree que los países no deberían tener que elegir entre la protección del medio ambiente y la protección de la salud pública.
«Eso es lo que está sucediendo actualmente«, dijo Simon. «En el futuro tenemos que asegurarnos de que estamos preparados para pandemias como esta y de que estamos preparados para enfrentarnos a ellas de una manera armónica con el ambiente; no tiene que ser una a expensas de la otra«.