Descubren bacteria que degrada el poliuretano
Al igual que otras formas de plástico desechado, los residuos de poliuretano representan un riesgo al ambiente y salud humana. En una nueva y alentadora investigación, científicos europeos se han topado con una resistente cepa de bacterias que parece prosperar en este material.
Una nueva investigación publicada en la revista científica “Frontiers in Microbiology” describe una nueva cepa identificada de bacteria del suelo que es capaz de romper los enlaces químicos encontrados en el poliuretano.
La nueva cepa, llamada Pseudomonas sp. TDA1, fue descubierta por científicos que visitaron un vertedero de basura lleno de piezas de plástico quebradizo.
Pasará un tiempo antes de que veamos a esta bacteria degradando cantidades de poliuretano desechado en masa, pero es un comienzo alentador. La nueva bacteria fue analizada por investigadores del Centro Helmholtz de Investigación Ambiental en Leipzig, Alemania, y otras instituciones.
El poliuretano se utiliza en frigoríficos, muebles, tiendas de campaña, edificios, pañales, calzado y cualquier otra cosa en la que se requieran materiales flexibles, ligeros y duraderos. Millones de toneladas de este material se producen cada año y en 2015 el mercado del poliuretano en los EE.UU. estaba valorado en 12.090 millones de dólares.
El poliuretano es difícil de degradar
Al igual que otros residuos plásticos, el poliuretano tarda mucho en degradarse y es muy caro de descomponer manualmente. También es difícil de reciclar porque el poliuretano no se derrite cuando se calienta. Como resultado, grandes cantidades de poliuretano termina en los vertederos de basura, donde se filtran toxinas al medio ambiente, incluyendo productos químicos que son perjudiciales para la mayoría de los microorganismos, por no mencionar los carcinógenos perjudiciales para los seres humanos.
Estas bacterias pueden soportar condiciones extremas
Este microorganismo recientemente identificado es una forma de Pseudomonas, un grupo de bacterias conocidas por su resistencia. Las bacterias Pseudomonas pueden soportar algunas condiciones extremas, como ambientes ácidos y altas temperaturas, por lo que se consideran organismos extremófilos.
En el laboratorio, la cepa TDA1 de Pseudomonas fue encontrada capaz de degradar la estructura química del poliuretano. Es más, los microorganismos fueron capaces de metabolizar estos compuestos y usarlos como alimento.
«Las bacterias pueden utilizar estos compuestos como una única fuente de carbono, nitrógeno y energía», dijo Hermann Heipieper, co-autor del artículo y científico principal del Centro Helmholtz de Investigación Ambiental-UFZ, en el comunicado de prensa. «Este hallazgo representa un paso importante para poder reutilizar productos (de poliuretano) difíciles de reciclar».
De hecho, el uso de microorganismos está introduciendo nuevas e interesantes posibilidades en nuestra lucha por reducir las enormes cantidades de desechos plásticos que actualmente ensucian nuestro planeta. Esta estrategia se conoce como biorreciclaje, en el cual organismos biológicos, como microbios, hongos e incluso insectos, son utilizados para descomponer los plásticos.
Una vez que los investigadores encuentran soluciones ya ideadas por la naturaleza, buscan luego como pueden estas ser sintetizadas en el laboratorio. Sin embargo, el desarrollo de un método para producir el material en masa representa otro desafío. Podrían pasar años antes de que veamos algún tipo de solución que pueda ser realmente desplegada en el campo.
En este caso, los científicos están buscando los genes responsables de la producción de enzimas extracelulares (los tipos de proteínas) que atacan y degradan las uniones plásticas. También están tratando de averiguar cómo Pseudomonas sp. TDA1 aprovecha este proceso para adquirir su energía. El nuevo estudio fue un ensayo preliminar a estas facetas y el trabajo futuro continuará en esta línea.